Se está realizando un relevamiento nacional de la exposición a concentraciones de flúor y arsénico a través del biomarcador ungueal (uñas) y su relación como factores de riesgos de patologías bucales, en una población de niños y niñas de entre 8 y 12 años de diferentes zonas de Uruguay. El estudio es financiado por el programa de proyectos de I+D de CSIC. Esta investigación conforma la segunda fase de un estudio iniciado en 2023, financiado por el Fondo conjunto de cooperación Uruguay y México, que tenía como objetivo la evaluación de flúor en el agua y en uñas de niños y niñas en cinco zonas de riesgo reportadas según la concentración de flúor. Este estudio identificó concentraciones de flúor superiores a 0,5-1,0 p.p.m.
Además, con respecto al arsénico, se han detectado en Uruguay concentraciones en el agua mayores a 0,01 mg/L, límite estipulado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según la Agencia Internacional para Investigación en Cáncer, la exposición al arsénico es carcinogénica para los seres humanos. Asimismo, hay pocas o nulas medidas de concientización y falta de información para quienes lo sufren.
Para medir la exposición a concentraciones de flúor y arsénico se utilizan las uñas como biomarcador no invasivo a través de la técnica de hexametildisiloxano y lectura con potenciómetro (ion selectivo) o espectrometría de absorción atómica y lectura con analizador de metales pesados. Este conjunto de métodos se utilizan para liberar, separar y cuantificar determinados elementos químicos en muestras biológicas o ambientales, como en este caso se trata de las uñas.
En el estudio, también se establecen los grados de fluorosis dental mediante análisis fotográfico intrabucal. A su vez, se busca la concentración de estos materiales en agua de consumo, y posteriormente, se realiza la correlación de la exposición a flúor obtenida a través de las uñas con los grados de fluorosis dental hallados y se estima la dosis diaria de exposición a arsénico, evaluando su riesgo para la salud.
A partir del estudio de los biomarcadores, el equipo investigador espera encontrar niveles de exposición a arsénico y flúor superiores a los establecidos por la OMS en zonas de riesgo. Se busca que este trabajo dé a conocer el daño ocasionado por la sinergia entre el flúor y el arsénico y desarrollar, a partir de estos datos, campañas de difusión y concientización del daño, generando un impacto positivo en la calidad de vida de las personas y futuras generaciones.





